| Por Teresa Mir y Rocío Curia |
Otra vez se llenaron las calles. Otra vez por por las que faltan, por las que aún no volvieron, por las que peligran. Se llenaron las calles, las plazas, las paredes y cientos de carteles, para que #NiUnaMenos pase a ser la memoria triste de un antiguo genocidio.